"Así es como somos. Somos buena gente y es difícil que nos convenzan de lo contrario… nacimos donde nacimos y somos lo que somos. Y sabemos muy bien de las dificultades que tiene vivir donde vivimos… una comuna de pocas casas apenas encaramada entre dos montes, alejados del centro de Medellín y de casi todo. Pero no queremos quedarnos del lado de los que, desde hace tiempo, vienen destruyendo, corrompiendo y matando. Somos jóvenes y tenemos esperanza. No ganamos apenas ninguna plata pero tenemos esperanza.
Renunciamos, hace tiempo, a seguir estudiando porque no supimos verle camino a nuestro esfuerzo, pero aún tenemos esperanza. La esperanza de vernos, un día, convertidos en gente capaz de darle a nuestro barrio todo lo que merece. Porque, usted ya debe saber, que para gente como nosotros, nuestro barrio lo es todo. Nuestro hogar, nuestro pasado, nuestro presente y nuestro futuro. Amamos lo que somos y amamos el lugar de donde somos. Y, aunque muchos digan que aquí matamos a todo el que se atreve a venir, eso no es la verdad. Usted mismo lo puede ver. Vino, llegó y se quedó fotografiando por nuestras calles, a la vista de todos. Y, dígame cucho, ¿le pasó algo? ¿Alguien vino y le amenazó? ¿Alguien le ordenó que dejara de tomar sus fotografías? Ya vio que no. Entonces, ¿sabe qué pasa? Pues que los pocos que, por aquí se mueven jodiéndolo todo, nos dieron la mala fama al resto. Y nosotros somos el resto. Y queremos vivir en paz.
Así que no hay problema en que usted nos tome la fotografía que nos pidió. Es con gusto que se lo permitimos. Para que las personas de su país, y de todas partes del mundo, sepan que pueden venir cuando se les antoje. Y que lo que aquí encontrarán será buena gente. A veces con mala cara, es cierto, pero buena gente igual. La vida es dura, pero aprendimos, de nuestros padres, que quedarnos sentados sobre nuestra queja no la va a ablandar."