Las escuelas suelen ubicarse en espacios abiertos, no demasiado alejadas de las pequeñas poblaciones de los alrededores. Equidistantes, dentro de lo posible, de todas ellas, para evitar que los alumnos deban realizar largos desplazamientos bajo el sol o bajo la lluvia estacional.
Casi la totalidad de los alumnos llega a la escuela a pie. Se les puede ver caminando, en pequeños grupos, por los senderos que corren paralelos a la carretera.
Llegan contentos, cantando incluso, pero llegan cansados. Y, sobre todo, llegan sedientos.
De ahí que la presencia de un pozo de agua potable se convierta en algo indispensable para garantizar la salud de los alumnos a lo largo de la jornada escolar. De otro modo es muy difícil que obtengan un óptimo rendimiento en sus clases. Y que logren sobreponerse al abatimiento y al cansancio provocados por el fuerte calor.
[caption id="attachment_4437" align="aligncenter" width="660"] BURKINA FASO 2017 - ECOLE DE SAABA - (HUBERT)[/caption]
Pepe Navarro
Natura, con su campaña Agua por Agua, apoya a Aigua per al Sahel en su labor humanitaria en Burkina Faso.