Los perros virtuales

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La Sociedad Protectora de Animales de Mataró (España) encontró hace tres semanas una perra abandonada por la calle. La perra, a la que llamaron Engi, presentaba una malformación en la pierna que le impedía caminar y requería una operación quirúrgica urgente, complicada y cara. Dicha operación es vital si se quiere evitar que el animal sufra en el futuro graves problemas articulares y dolores muy severos.

El coste aproximado de la intervención es de 1000 euros, de los que carece la Protectora. Por ello, decidieron acudir a una plataforma de crowdfunding para tratar de recaudar ese dinero y poder así salvar la vida del animal. El éxito de la convocatoria fue tan grande que en menos de 24 horas se consiguió doblar esa cifra. Así pues, Engi podrá ser operada y entrar en el programa de adopciones. La presidenta de la Sociedad Protectora de Animales de Mataró ha declarado que "los ciudadanos y nadie más son los verdaderos protagonistas de esta historia".

A veces le hacemos poco caso al mundo virtual que se ha construido a nuestro alrededor en los últimos años. Sí, es cierto que casi todos tenemos una cuenta de correo electrónico y navegamos por internet a diario. También es verdad que muchos tenemos cuenta en Facebook y Twitter, e incluso administramos un blog. Pero podemos pensar que las redes sociales no son nada más que un entretenimiento, una opción para pasar el rato. Y las redes sociales son como un periódico en papel, como un libro, como la radio o la televisión: herramientas para comunicarse. En qué se vayan a convertir depende exclusivamente del uso que les demos cada uno de nosotros.

Engi, que es una perra real, podrá tener una vida nueva gracias al mundo virtual.